La artesana paraguaya María del Carmen, 38 años, cree en el empoderamiento de las mujeres rurales por medio de la producción y la comercialización del algodón, además de generar una importante fuente de trabajo e ingreso a las familias que se dedican a la agricultura primaria o de pequeña escala.
Su trayectoria profesional de artesana e instructora en telar rustico en Paraguay, se entrelaza con su historia con el algodón, que inició cuando aún era una niña, por medio del cultivo en el jardín de su tía, hasta los días actuales, cuando siembra su propio algodón nativo y orgánico, materia prima para las prendas que produce.
En su taller, artesana desarrolla una serie de artesanías que buscan valorar y dar visibilidad a la cultura de su país, por medio de la técnica de bordado Ao po´i, que aprendió cuando tenía 7 años, y posteriormente las técnicas de tejer e hilar, aprendidas en el Instituto Paraguayo de Artesanía (IPA), en el 2004. El Ao po'i es una palabra en Guaraní que significa ´tejido fino´ y surgió en el siglo XIX en Yataity, Paraguay. Actualmente, se constituye en uno de los productos artesanales paraguayos más apreciados en el país.
Con la tela del Ao po'i, María del Carmen produce ropas, manteles y bufandas. Su producción es comercializada por medio de las redes sociales, de manera digital, directamente a compradores interesados. Además, la artesana también trabaja en el Instituto Paraguayo de Artesanía (IPA), en la sucursal del IPA-Yataity, como instructora de telar rústico, donde capacita a las personas interesadas en aprender el bordado y tejido en telar. Es en IPA-Yataity que funciona la escuela de salvaguarda del auténtico Ao po'i, donde ella enseña todo lo referente a esta técnica.
La artesana observa, tras años de experiencia, que en términos de mercado la artesanía hecha en algodón orgánico es mucho más valorada por su calidad diferenciada y que, hubo un aumento en la demanda por estos tipos de productos, en los últimos años.
María del Carmen incentiva las mujeres de América Latina y el Caribe a que se dediquen a la actividad artesanal, a partir del uso de la fibra del algodón: “no tengan miedo a experimentar cosas nuevas. [La artesanía] es una actividad que genera un beneficio económico, así como la realización personal".
Ampliando conocimientos
Con apoyo del proyecto +Algodón y del IPA, María del Carmen amplió sus conocimientos en la producción de artesanías en algodón al participar del curso virtual Más Algodón, Más Artesanías: Desarrollo de una minicolección del hilo a la prenda y del 2do Encuentro Nacional de la Red Argentina de Mujeres Algodoneras, en Santiago del Estero. Durante ese encuentro, artesanas paraguayas y argentinas intercambiaron saberes y experiencias en el hilado y la artesanía en algodón.
El proyecto de cooperación sur-sur trilateral +Algodón es ejecutado por la Agencia Brasileña de Cooperación del Ministerio de Relaciones Exteriores (ABC/MRE), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y siete países socios, entre ellos, el gobierno de Paraguay, por medio del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
El trabajo de la artesana puede ser acompañado en la red social Lazos, creada en el marco del proyecto +Algodón para conectar experiencias y conocimientos en torno al algodón sostenible latinoamericano. Lazos es una aplicación gratuita y está disponible para teléfonos móviles por medio de Google Play Store y la App Store.
La cadena algodonera y las mujeres rurales
Trabajar por la sostenibilidad del sector algodonero de la región requiere trabajar para transformar los contextos de desigualdad y dotar de capacidades de las mujeres rurales para su empoderamiento y participación en justas condiciones en todos los eslabones de la cadena de valor del algodón.
Según el estudio “Mujeres de Algodón: roles de género y participación en las cadenas de valor en Argentina, Bolivia, Colombia, Paraguay y Perú”, publicado en el marco del proyecto +Algodón, las mujeres rurales del sector participan a lo largo de toda la cadena de valor del algodón, principalmente en el eslabón productivo contando actividades como la preparación del terreno, la siembra, el monitoreo de la cosecha así como en la destrucción del rastrojo y en la elaboración y comercialización de artesanías.
Tomado de: FAO