Es una celebración ancestral que inicia en la época de invierno, se celebra el 21 de junio de cada año, en honor al Dios sol y a la Paccha mama (madre tierra). En el calendario solar marca el inicio del año nuevo, siendo importante para el calendario agrícola andino, es considerada la fiesta más relevante de los Andes.
El festejo se remonta al año de 1430, fue establecida por el inca Pachacútec como una forma de agradecimiento a Inti (sol) y a Paccha mama, por las fructíferas cosechas.
Se lleva a cabo en varios países con comunidades indígenas de la región andina, como lo son: Ecuador, Colombia, Perú, Bolivia, Chile y Argentina.
Durante el Inti Raymi se desarrollan varias actividades que incluye la danza del sol y la luna, música, deportes, concursos y ofrendas que se presentan a la paccha mama, con el fin de tener buena cosecha y prosperidad durante todo el año, esta celebración es más que una fiesta ancestral ya que se comparte con la naturaleza para tener una purificación espiritual y renovación de energía.
Esta fiesta se vive en algunas provincias del Ecuador, por ejemplo, las comunidades del norte ecuatoriano como: Yavirac, Calacalí, Cochasqui, Cayambe e Imbabura. También en Ingapirca, Cañar, Azogues, comunidades de Azuay y Loja.
En algunos colegios también se conmemora este día, se hace una pampa mesa entre todos los estudiantes y comparten los frutos de la madre tierra. Las coloridas danzas que se realizan en honor al Dios Inti, buscan agradecer la abundancia de las cosechas y en cuanto a la Paccha mama (madre tierra) por cuidar los cultivos.
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