Elizabeth Montes es una joven de 29 años, habitante de la vereda el Latón, en el Municipio de Valencia en el Departamento de Córdoba. Vive junto a su hijo y su esposo que se dedica a la agricultura como muchos en la región, cultivando maíz, arroz, yuca y plátano.
Elizabeth pasaba sus días dedicada a las labores del hogar y el cuidado de su hijo y en algunas ocasiones acompañaba a su esposo a los cultivos. Para apoyar la economía del hogar, se dedicaba en sus ratos libres a las ventas por catálogo de productos de belleza.
Hace 10 meses, un técnico de la FAO visitó la vereda el Latón y citó a una reunión a la comunidad, para hablarles de un proyecto financiado por la Agencia Sueca de Cooperación Internacional. Invitaron a los habitantes de la vereda a emprender un proyecto en comunidad, mediante el cual aprenderían diferentes técnicas de siembra y mantenimiento de cultivos de pancoger y hortalizas, recibirían educación nutricional y talleres de cocina, para que aprendieran a preparar y consumir diferentes alimentos de forma saludable.
A Elizabeth le sonó la idea y se vinculó al proyecto. Con el pasar de los días y en cada reunión, se fue consolidando como una lideresa dentro de la comunidad de la vereda. Apoyaba al equipo en las convocatorias, organizó a sus vecinos en comités y animó a quienes no querían vincularse a que lo hicieran. Sin saberlo, se convirtió en un referente de su comunidad y la persona a la que todos acudían cuando tenían inquietudes e ideas.
Al preguntarle a Elizabeth por qué decidió asumir esa responsabilidad ella responde: “Vi la oportunidad de realizar una labor en beneficio de la comunidad, apoyarlos para sacar adelante el proyecto, ocupar mi tiempo en actividades diferentes a las que venía realizando anteriormente”.
A través del proyecto, Elizabeth descubrió su vocación de líder y los habitantes de la vereda aprendieron a trabajar de manera comunitaria, superando momentos difíciles, de disenso y desánimo.
“Cuando mis compañeros no asisten a las actividades en grupo, voy a sus casas, indago sobre su situación, los animo a que salgan adelante y se superen. Soy una persona de muchos retos, me preocupo y estoy al pendiente de todas las situaciones que pasan en la vereda” Dice orgullosa esta joven.
Todo el proceso ha contado con la decidida colaboración de los habitantes de El Latón. “Como comunidad que somos, nos reunimos, dialogamos y de acuerdo a las indicaciones de Don Fernando, (el técnico de la FAO) buscamos el lote que llenara esos requisitos. De igual manera lo hicimos para el galpón de las gallinas. Una de las participantes del grupo prestó el lote para el CDC (Centro Demostrativo de Capacitación y Producción Comunitaria), y otra persona de la comunidad hizo lo mismo con el lote de las gallinas. La fuente de agua que nos surte proviene de la quebrada” resalta su líder.
Hoy en día la comunidad está en capacidad de preparar bioinsumos, como abonos orgánicos y productos a base de plantas de la región para el manejo de plagas y enfermedades en sus cultivos, además, siembran plantas nuevas que no conocían antes; en lo que respecta a las gallinas aprendieron a manejar un galpón, y a tener los animales en mejores condiciones, tenerles alimento y rotarlas en los cuatro potreros, para que consuman pasto, mejoren su alimentación y produzcan huevos de manera permanente. Aprendieron también a preparar los alimentos obtenidos de diversas formas y mejoraron su dieta.
Nada de esto habría sido posible sin el liderazgo de Elizabeth y la participación de su comunidad. La lección más importante que les deja esta experiencia es que unidos todo es posible: “Todos los días va un grupo diferente al CDC y al galpón a trabajar, a regar las plantas, a cosechar. Una vez a la semana nos reunimos todo el grupo en general, para tomar decisiones y llevar ideas para seguir trabajando, para seguir adelante… somos capaces, ya que somos un grupo de trabajo muy unido, hemos vencido contratiempos y queremos seguir hacia adelante”.
El Proyecto “Rehabilitación de los medios de subsistencia agropecuarios y la seguridad alimentaria de personas vulnerables afectadas por la violencia en Córdoba y Putumayo, como estrategia para la implementación del derecho a la alimentación, la reconstrucción del tejido social y la promoción de acciones de paz”, financiado por la Agencia Sueca de Cooperación Internacional, trabajó en tres municipios de Córdoba y seis de Putumayo, con 4 255 familias, en el periodo 2014-2016.
Fuente: FAO en Colombia