Dos nietos de agricultores peruanos crearon una herramienta que permite a campesinos recibir y enviar dinero digital desde cualquier lugar del mundo, por lo que se hicieron acreedores del premio Desafío Mundial de Innovación de la FAO.
“¿Cuál es el mejor limón para el ceviche?”, pregunta Hugo Piñarreta mientras recorre las calles dela ciudad de Piura, Perú, su tierra natal. “Todo el país sabe que tenemos el mejor limón”, responde con orgullo y una gran sonrisa.
“Mi abuelo, Don Urbano, era agricultor.Tenía una hectárea y media en el Valle de San Lorenzo.Mis hermanos y yo recogíamos la producción de esta fruta, entre juegos, y pensando en luego comer un rico cebiche. En la chacra también se cosechaba mangos, y otros cultivos, como en todas las tierras de los agricultores familiares. Mi padre también estaba ligado a la tierra era técnico agrario”, recuerda.
En esa época, cuenta Hugo, no era consciente de la lucha que enfrentaban su abuelo y su padrepara sacar adelante su negocio.Al igual que muchos agricultores familiares a nivel global, el limitado acceso al crédito y servicios financieros,el acceso a mercados y que además es gestionada y operada por una familia y que depende principalmente de la mano de obra sus miembrossigue siendo una problemática.
Laagricultura familiar es vital porque produce el mayor porcentaje de los productos alimenticios que se consumen en el mercado nacional de Perú, y Hugo lo sabe. Es por esta razón que está convencido de que se requiere unir esfuerzos para impulsar a los agricultores familiares de la región: “A través de la agricultura digital me he dedicado a crear soluciones que aumentan la productividad, empoderan al agricultor y hacen sostenible la agricultura en el mundo”.
Así es como este piurano, nieto de un agricultor de limones e hijo de un técnico agrícola, se ha especializado en negocios internacionales y vinculación tecnológica, y lidera junto a su socio, Robinson López, también piurano y de familia agricultora, la empresa Identi. Ambos desarrollaron una billetera de identidad digital que funciona sin internet y con una biometría de vozcon un 96,5% de confiabilidad en la que, a la fecha, ya cuentan con más de 36 mil usuarios registrados en Perú, Colombia, México y Nepal.
Esta herramienta es un recurso con tres funciones: un pasaporte electrónico, un medio de pago mundial en el que se permite recibir y enviar dinero digital de cualquier lugar del mundo y una red que permite que la persona pueda compartir información de su experiencia con terceros y también recibirla, lo que permite construir un ecosistema.
PiñarretaMezones es un emprendedor que ha lanzado cuatro start ups al mercado, y que bajo el lema de “la agricultura familiar es la solución y no el problema”, afirma hacer negocios con los agricultores familiares, no los “ayuda”. Hugo subraya que su tecnología empodera al agricultor, lo hace visible, lo convierte en propietario, fuente de información y protagonista de su historia. Durante el primer año del proceso de investigación y creación, encontraron que los problemas de mercado, asesoría técnica, poco acceso a insumos agrícolas de calidad y financiamiento, eran las causas de una dificultad de fondo: los agricultores eran invisibles para quienes querían comprarles sin intermediarios. “La solución que más sentido hizo fue crear una billetera de identificación”, señala Hugo.
Los desafíos en el proceso de creación de la billetera de identidad digital se convirtieron en la gran oportunidad de reivindicar al agricultor familiar. El uso de la biometría por voz sorprende a quienes conocen de esta tecnología. Hugo señala que la firma biométrica dactilar -ampliamente usada- no podía implementarse en esta innovación porque los agricultores, por la naturaleza de su labor, tienen las huellas digitales desgastadas. Además, esta biometría requiere de internet, al que muchos agricultores afirmaron no tener acceso por días cuando se internan en las labores de siembra y cosecha.
¿Cómo desarrollar la identidad digital sin Internet y en celulares análogos -cuyo uso es extendido en más del 50% de agricultores encuestados-? Ante este reto, respondieron a uno de sus hallazgos, el gran valor que la palabra y la voz tiene enla cosmovisión rural: “Hemos desarrollado un algoritmo que básicamente te detecta la voz, detecta que es una voz humana, que estáen vivo y no es grabada. Y detecta que eres tú con un 96.5% de confiabilidad. En cambio, la biometría facial tiene un 70% - 75% de confiabilidad, la dactilar entre un 80% - 85% de confiabilidad. Nuestra firma biométrica es mucho más confiable”.
Otro reto fue validar la billetera. Iniciaron con un piloto con agricultores dedicados al cultivo de caféen Monzón, Huánuco. Hoy son más de 36 mil usuarios en cuatro países que hablan diferentes lenguas y cuyos niveles de alfabetización digital son diferentes: “Creo que uno de los logros más grandes es que más de la mitad de ellos se han conectado con otro proyecto porque ya son visibles. (…) Convertimos-al agricultor- en un ciudadano del mundo. Esta es la ventaja de esta billetera de identidad digital”, declara el líder de Identi. La iniciativa ganó el premio Desafío Mundial de Innovación de la FAOy también fue presentada del Foro Mundial de Alimentación 2024 en Roma.