El 3 de diciembre de 2018, la Asamblea General de las Naciones Unidas suscribió por consenso una resolución que proclama el 24 de enero “Día Internacional de la Educación”, con el objetivo de reconocer el papel que cumple la educación en favor de la paz y del desarrollo.
Con esta declaratoria se quiere dejar en claro que, sin una educación de calidad, inclusiva y equitativa para todos y todas, y que esta a su vez brinde oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida, los países no lograrán alcanzar la tan anhelada igualdad de género ni, mucho menos, se puede romper con el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, niñas, jóvenes y adultos, robándoles las oportunidades de crecer de manera integral.
En la actualidad, existe un gran número de niños y niñas, jóvenes e incluso adultos que siguen sin ir a la escuela. Esto ha desembocado en un nivel de analfabetismo, no pueden leer ni escribir, y menos aún han incursionado en el mundo digital.
Organismos internacionales como, la UNESCO incita a los gobiernos, instituciones internacionales y sus asociados a ver a la educación universal de calidad en una prioridad principal, siendo ésta la semilla que logrará a futuro, todos los cambios deseados en la vida de cada uno de los individuos, sus familias y la comunidad.
"Este día es la ocasión de reafirmar los principios fundamentales. En primer lugar, la educación es un derecho humano, un bien público y una responsabilidad pública. En segundo lugar, la educación es la fuerza más poderosa de que disponemos para garantizar mejoras significativas en la salud, estimular el crecimiento económico y aprovechar el potencial y la innovación que precisamos para construir sociedades más resilientes y sostenibles. Por último, necesitamos urgentemente un llamamiento a la acción colectiva en favor de la educación en el plano mundial." Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO AGENDA 2030 Y ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) La Agenda 2030 es el plan global para la erradicación de la pobreza, la lucha contra el cambio climático y la reducción de las desigualdades más ambicioso alguna vez adoptado por la comunidad internacional. Fue desarrollada sobre la base de consultas nacionales que llegaron a las poblaciones en mayor situación de vulnerabilidad de cada país, entre ellas cerca de 80 mil personas en el Perú, y fue aprobada por unanimidad por los 193 países de las Naciones Unidas. Su objetivo es claro: Lograr un mundo donde nadie se quede atrás. Para hacer este compromiso una realidad, los Estados Miembros aprobaron 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas asociadas a ellos, que dan cuenta del alcance y la ambición de este plan universal. Los ODS reflejan la complejidad del desarrollo, haciendo énfasis en sus dimensiones sociales, económicas y ambientales; por ello, son integrados e indivisibles – Avanzar en el cumplimiento de uno de ellos es virtualmente imposible sin avanzar en todos los demás. ¿Qué son los ODS? Los ODS representan un camino hacia el desarrollo sostenible en el que la acción común y la innovación son clave, no solo entre Estados -como había sucedido con agendas internacionales de desarrollo anteriores- sino también con la participación de nuevos actores del desarrollo, como el sector privado, la juventud, la sociedad civil y la academia, entre otros. La implementación total de la Agenda 2030 será liderada por los Estados Miembros, pero representa una situación de “ganancia-ganancia” para todos los actores involucrados, para las generaciones de hoy y las que vendrán mañana. Los 17 ODS son: Fuente: FAO Objetivo 4: Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos La consecución de una educación de calidad es la base para mejorar la vida de las personas y el desarrollo sostenible. Se han producido importantes avances con relación a la mejora en el acceso a la educación a todos los niveles y el incremento en las tasas de escolarización en las escuelas, sobre todo en el caso de las mujeres y las niñas. Se ha incrementado en gran medida el nivel mínimo de alfabetización, si bien es necesario redoblar los esfuerzos para conseguir mayores avances en la consecución de los objetivos de la educación universal. Por ejemplo, se ha conseguido la igualdad entre niñas y niños en la educación primaria en el mundo, pero pocos países han conseguido ese objetivo a todos los niveles educativos. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, promueve sistemas educativos que toman en cuenta las necesidades de las comunidades rurales y apoyan un mejor acceso a la educación primaria. Esta Organización ayuda a los países por medio de la organización de huertos escolares y programas de alimentación escolar. Estas iniciativas fomentan la asistencia escolar, aportan beneficios nutricionales y de desarrollo físico a los niños y niñas. Iniciativas como estas generan beneficios sociales, económicos y ambientales de largo plazo para la comunidad en su conjunto. Conoce más sobre los ODS aquí: http://www.fao.org/3/a-i6919s.pdf Conoce más sobre el Objetivo 4 de los ODS aquí: https://www.youtube.com/watch?v=8_p91aYOGKw Fuentes: https://es.unesco.org/commemorations/educationday http://www.fao.org/sustainable-development-goals/goals/goal-4/es/ |