Antecedentes
Para cumplir con las metas de los ODS 1 y 2 a nivel rural, se requerirá de un gran esfuerzo orientado a diversificar sus economías y generar nuevos vínculos con mercados dinámicos. Esta necesidad crece a raíz de la realidad post COVID-19, donde, entre otros, será necesario recomponer muchas cadenas del sistema alimentario, con el consiguiente desplazamiento de empleos e ingresos.
Las actividades generadoras de ingresos vinculadas al turismo sostenible en áreas rurales cobran creciente importancia en la región. El agroturismo, el ecoturismo y el turismo identitario son actividades económicas relevantes para muchos hogares de comunidades y localidades rurales y urbano rurales de amplias zonas geográficas de los países de América Latina y el Caribe. En otras palabras, el Turismo Rural -en sus distintas variantes- se constituye en una oportunidad de empleos e ingresos complementarios en territorios rurales con “ventajas comparativas” y en un primer “catalizador” para expandir la digitalización en la actividad agrícola y rural en los territorios.
Con esta perspectiva, en septiembre de 2020, la FAO y el UNWTO firmaron un Memorando de Entendimiento para apoyar a los países en promover e impulsar el turismo rural como estrategia de generación de ingresos y empleos no agrícolas. En la misma línea, FAO ha lanzado el Programa “1000 Digital Villages” a través del cual se busca identificar 1.000 aldeas o pueblos en todo el mundo para integrarlos a la era digital. En América Latina y el Caribe (ALC), se impulsa dentro de esta agenda el proyecto “Aldeas Digitales en América Latina.”
Objetivo Actividad
Poner en marcha la iniciativa “Aldeas Digitales en América Latina y El Caribe” como parte de la iniciativa global “1000 Digital Village”, logrando una alta visibilidad mediática y convocando la participación y compromiso de agentes públicos y privados.
¿Quiénes participan?
Contrapartes gubernamentales de los ministerios de Agricultura, Turismo, Finanzas, Economía, y socios.
Transmisión en vivo (29 de abril)
Tomado de: FAO Américas